jueves, 21 de marzo de 2013

UN MANIFIESTO SOBRE LA ABERRACIÓN




La idea de escribir un manifiesto es un homenaje a la pintura que hoy cumple veinte años como el centro de la exposición. En una transición llena de turbulencias y meneos, amigos y reyertas, soledad y búsqueda, una vida que pasó de ser humilde y sana se convirtió en una subasta de recuerdos para mantener el tipo...

Hay muchas huidas en la vida y hay que reconocerlas y aceptarlas. No todo son logros propios que son pocos, pero el hecho de llegar, es uno y de poder escribirlo con cierta objetividad, siempre desde la molicie y el miedo, aunque sea oculto y dormido en los laureles -arbustos de laurel que crece salvaje- es una razón que tiene su lógica..., un manifiesto de vida es, a pesar de todo, una declaración muy resumida de la guerra diaria por vivir.

En 1993 llegaba a la isla después de otra de mis escapadas, pero no venía a una expedición organizada, ni siquiera era una aventura, tampoco la isla me ofrecía más curiosidad que seguir adelante por que no hay otro remedio y es la única alternativa a la que estaba expuesto en aquel momento, directo de las plazas de Lavapies rodeado de amigos que morían, de alertas y de riesgo, de pena y miseria.

Pude conservar un pequeño estudio en Madrid durante unos meses y había salido del infierno de una relación rota y brutal, llena de ingenuidades y valentía... Lo recuerdo todo tan bien y aún me entristece hasta el punto de no poder volver más que con la memoria a algunos recuerdos, algunos momentos...

En el recuento de los años, ha habido fechas que no tienen números, ni archivos que puedan relacionarse como la lista de un currículum..., siempre me ha dado vergüenza no tener uno que sea mínimamente aceptable para presentarme y me sorprende lo fácil que resulta hacer uno... Hay profesionales y programas informáticos en los que viene preconfigurado como la fórmula mágica que me va a abrir las puertas al mundo... 

En medio de las masas, querido, no hay currículum que valga... Puede haber estadísticas o listas de espera, o directamente muros llenos de deseos y de nombres que se quedaron en el intento..., y de lamentaciones, si, de esos hay muchos y de todos hay algunos que es un verdadero lamento que aún sigan en pie.

Hay una base de experiencia con la pintura como los estratos que quedan en un yacimiento arqueológico, donde tal vez entienda la razón de este manifiesto, pero no ahora.

De esta fecha quedan solamente cinco puntos que tienen que ver más con el desarrollo de un experimento científico sobre un virus que ha infectado -otra vez- a una vida enferma que es en sí una enfermedad para otras formas de vida...




No pasa el tiempo por la Historia dejando huellas de los errores cometidos en el pasado, pasamos nosotros y los historiadores son autores de nuevas ideas editadas en piel humana, vegetal, o animal, sin escrúpulos, llenas de prejuicios y de caprichosas decisiones arbitrarias. De esto da buena cuenta la duquesa roja, Luisa Isabel Álvarez de Toledo, duquesa de Medina Sidonia, en una entrevista que se hizo pública a su muerte... Lo afirma contundente y fue, sin duda una persona íntegra -a la hora de manifestarse en vida- contra lo establecido. 

Guardaba -por herencia- un apellido noble y un archivo de legajos que es posiblemente el más antiguo de nuestra Historia o de la historia de este país... Porque declaraba abiertamente cómo de niña, ayudando a su antecesor, era testigo de lo absurdo que resultaba desechar unas pruebas y aceptar otras para configurar ese libro que durante mucho tiempo llamamos Historia.

Doy fé que aquella no era una vida vacía..., pude conocer aquel lugar y a su persona, sin merecerlo, por circunstancias, por haber estado en aquella relación difícil y humeante, encerrado en medio del Puerto del Infierno.

Quedan todos los días que no están escritos, y tantas personas que ya no pueden hablar..., que es mejor dejar sólo constancia de ello en un manifiesto...

Escapamos cada cual a su manera, llenos de ruinas y rutinas, de responsabilidad y exilio, de culpa y penas, como podemos... 

Llegamos a hoy y a ahora y ni siquiera podemos hacer un plan que vayamos a dar por seguro... Tal vez una declaración de intenciones, hay muchos nombres para dejar en buen papel que el día de hoy es una parte de toda nuestra vida y que nuestra vida es parte del legado de otros que no están o que vendrán.

Ha muerto un amigo... Otro más... 

Yo puedo estar enfermo de mis nervios y no querer hablar nunca de lo que hice o dejé de hacer, pero hoy esto es un manifiesto..., es por los muchos insultos y reyertas de los que he salido ileso, al menos hasta hoy y lo puedo contar, ahora...

El cuadro es una flor, y sus pétalos son una ofrenda para esa amistad, para todas esas personas por las que he sido acompañado y de las que he aprendido, traumáticamente, felizmente, estúpido y tenaz, a llegar a hoy...




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